viernes, 29 de mayo de 2009

Sensación


Fue recien. Justamente recien.

Mi padre estaba y aun esta hablando por el aparato con su hermana.

Ultimamente esto se ha vuelto ya casi como un ritual, porque son las mismas charlas, los mismos problemas, las mismas palabras.

Ese no es el caso. En parte si pero, es a otra cosa a la que quiero llegar.

En todas estas conversaciones, hay un elemento común. Una persona, para ser mas excactos, un hombre (o al menos es eso lo que parece).

El otro día salí de mi casa como todas las mañanas de dias hábiles.

Mientras esperaba todo el ajetreo de subidas y bajadas, paso uno de los tantos temporeros por frente del portón.

Y vi su cara. Vi esa mirada y esas facciones. Era él. Aquella persona. Dijeron que solo se parecia, pero era identico para mi.

Tenia maldad en sus ojos. Una cara nisiquiera humana, me refiero a un mal que sobrepasaba todo límite.

Y pasaron ya los dias, y él paso en un segundo.

Queria de todas formas alcanzarlo, verle de nuevo para saber si realmente era él, o solo un espejismo.

Como era común nos demoramos en partir, pero entre una bicicleta y una camioneta hay bastante diferencia, asi que, lo alcanzamos.

Y al alcanzarlo fue nuevo por un segundo, pero al pasar por su lado, el hizo un gesto horrible.

No puedo llamar a eso mirada porque, no vi sus pupilas, pero si sus parpados. Son como cuando miras a escondidas, cuando quieres ocultarte de algo, y nisiquiera miras a los ojos.

Fue escalofriante.

Fue como si estuviera esperando que pasaramos por su lado, y como si estuviera esperando mi geste, mi movimiento.

Lo sabia todo.


Debe salir...


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